O profesorado galego reacciona. E faino a través dun movemento "apartidista e plural na defensa do ensino público galego, á marxe de organizacións sindicais, pero non necesariamente en contra delas", rezan os seus principios. Galicia Hoxe
Hoxe día 28 de Xuño é o aniversario do traslado dos restos mortais de Castelao ao Panteón de Galegos Ilustres e hoxe saíu á rúa a derradeira publicación do xornal en lingua galega Galicia Hoxe.
Ovido no libro X (560-707) da Metamorfose cóntanos a historia de Atalanta e Hipomenes.
A deusa Venus, baixo a sombra dun álamo , descansando ao carón de Adonis, cóntalle esta historia:
Esta era unha moza que vencía a todos os homes correndo e non se podía dicir se era máis fermosa pola gloria dos seus pés ou polo don da súa beleza. Un día consultou o oráculo para saber se lle conviña casar e este díxolle "Non che convén un esposo, fuxe de telo. E aínda así non conseguirás librarte e viva veraste privada de ti mesma".
Atalanta vive nas fragas, fuxindo do montón de pretendentes que queren casar con ela, poñéndolles unha condición: " Non me conseguiredes a non ser que me venzades na carreira, o que venza, casará comigo, os outros morrerán, esa será regra da competición".
Hipómenes sentou como espectador da carreira pensando "Como pode haber alguén que busque esposa a tanto risco?". Pero cando viu o rostro e o corpo de Atalanta quedou pasmado e levantando as mans dixo: "Perdoade todos os que acabo de censurar sen coñecer o premio". Pensándoo mellor e despois de ver como vence aos outros mozos, pensa "Por que vou deixar sen probar a sorte?, aos valentes o poder dos deuses axúdaos".
O mozo sen temor, despois de ver o que lles pasara aos que o precederan, erguese no medio dos espectadores e fixando na moza a mirada, dille: "Por que buscas unha gloria fácil vencendo aos febles?. Mídete comigo..."
Mentres el lle conta quen é e enxalza a todos os seus antepasados a moza contémplao e non sabe se prefire ser vencida ou ganar, e di: "Que deus malévolo quere perder a este e lle ordena aspirar a este matrimonio con perigo da súa preciosa vida? Non vallo tanto, ao meu xuízo. E non é que me impresione a súa fermosura, senón o feito de que aínda é un neno...
...
Hipómenes reclama que eu asista á carreira e conmovida decido socorrelo.
Hai un campo co nome de Támaso, que é a mellor zona da terra de Chipre, zona que me consagraron dende hai tempo. Na metade do campo hai unha chaira onde brilla unha árbore amarela coas pólas de amarelo ouro: de alí viña e levaba tres froitas de ouro que coa miña man collera da árbore e sen que ninguén puidese verme máis ca el, presenteime a Hipómenes e mostreille como podían serlle de utilidade.
As trompetas dan a sinal e comeza a carreira, o público anima a Hipómenes que fatigado ve que a meta aínda está moi lonxe, entón tira unha das tres froitas. A moza queda atónita, descoida a carreira e colle do chan o ouro, o mozo adianta e os espectadores aplauden. Ela de novo recupera na carreira o tempo perdido e de novo o mozo queda atrás, pero ela detense polo lanzamento doutra froita. Xa só quedaba o último tramo da carreira "asísteme agora" di " deusa a quen debo este obsequio", e para que ela tardase máis en volver, tirou con moita forza o resplandecente ouro a un lado do campo e en dirección transversal. A moza parecía dubidar en ir buscala, pero eu obrigueina a collela e unha vez que colleu a mazá, xa fixen máis pesada e estorbei a Atalanta tanto polo peso como pola detención, e a moza quedou atrás; o vencedor levou o premio.
Acaso non merecín que me dera as grazas, que me ofrecese incenso, Adonis?. Nin se lembrou de darme as grazas e do incenso esqueceuse. Isto provocou a miña cólera, ofendida polo desprezo, propúxenme dar un escarmento.
Pasaban eles ao carón do templo, oculto na espesa fraga, que estaba adicado á deusa Cibeles, e eu aconséllolles descansar; daquela Hipómenes foi invadido por un inoportuno desexo, suscitado por min, de xacer con Atalanta. Ao carón do templo había un recuncho semellante a unha cova, cun revestimento natural de pedra pómez, lugar consagrado desde antigo pola relixión, onde o sacerdote do templo levara moitas imaxes de madeira de antigos deuses. Alí entra Hipómenes e Atalanta e profanan o santuario. A deusa Cibeles castigounos. Comezaron a medrarlles unhas guedellas azafranadas cubrindo o pescozo, os dedos curváronselles formando gadoupas , ... en vez de palabras emiten ruxidos e tascan cos seus dentes os freos de carro de Cibeles, convertidos en leóns.
Versión en castelán
El profesorado gallego reacciona. Y lo hace a través de un movimiento "apartidista y plural en la defensa de la enseñanza pública en gallego, al margen de organizaciones sindicales, pero no necesariamente en contra de ellas", rezan sus principios. Galicia Hoxe
Hoy día 28 de Junio es el aniversario del traslado de los restos mortales de Castelao al Panteón de Gallegos Ilustres y hoy salió a la calle la última publicación del periódico en lengua gallega Galicia Hoxe.
Ovido en el libro X (560-707) de la Metamorfosis nos cuentan la historia de Atalanta e Hipómenes.
La diosa Venus, bajo la sombra de un álamo , descansando junto a Adonis, le cuenta esta historia:
Esta era una joven que vencía a todos los hombres corriendo y no se podía decir si era más hermosa por la gloria de sus pies o por el don de su belleza. Un día consultó el oráculo para saber si le convenía casarse y este le dijo "No te conviene un esposo, huye de tenerlo. Y aun así no conseguirás librarte y viva te verás privada de ti misma".
Atalanta vive en los bosques huyendo de los pretendientes que quieren casarse con ella, poniéndoles una condición: " No me conseguiréis a no ser que me venzáis en la carrera, el que venza, se casará conmigo, los otros morirán, esa será la regla de la competición".
Hipómenes se sentó como espectador de la carrera pensando "¿Como puede haber alguien que busque esposa a tanto riesgo?". Pero cuando vio el rostro y el cuerpo de Atalanta quedó pasmado y levantando las manos dijo: "Perdonad todos los que acabo de censurar sin conocer el premio". Pensándolo mejor y después de ver como vence a los otros jóvenes, piensa "¿Por qué voy a dejar sin probar la suerte?, a los valientes el poder de los dioses los ayuda".
El joven sin temor, después de ver lo que les había pasado a los que lo habían precedido, se levanta en medio de los espectadores y fijando en la chica la mirada, le dice: "¿Por qué buscas una gloria fácil venciendo a los endebles?. Mídete conmigo..."
Mientras él le cuenta quién es y ensalza a todos sus antepasados la joven lo contempla y no sabe si prefiere ser vencida o ganar, y dice: "¿Qué dios malévolo quiere perder a éste y le ordena aspirar a este matrimonio con peligro de su preciosa vida? No valgo tanto, a mi juicio. Y no es que me impresione su hermosura, sino el hecho de que aún es un niño...
...
Hipómenes reclama que yo asista a la carrera y conmovida decido socorrerlo.
Hay un campo con el nombre de Támaso, que es la mejor zona de la tierra de Chipre, zona que me consagraron desde hace tiempo. En la mitad del campo hay una llanura donde brilla un árbol amarillo con las ramas de amarillo oro: de allí venía y llevaba tres frutas de oro que con mi mano había cogido del árbol y sin que nadie pudiera verme más que él, me presenté a Hipómenes y le mostré cómo podían serle de utilidad.
Las trompetas dan la señal y comienza la carrera, el público anima a Hipómenes que fatigado ve que la meta aun está muy lejos, entonces tira una de las tres frutas. La joven queda atónita, descuida la carrera y coge del suelo el oro, el joven se adelanta y los espectadores aplauden. Ella de nuevo recupera en la carrera el tiempo perdido y de nuevo el joven queda atrás, pero ella se detiene por el lanzamiento de otra fruta. Ya sólo quedaba el último tramo de la carrera "asísteme ahora" dice " diosa a quien debo este obsequio", y para que ella tardara más en volver, tiró con mucha fuerza el brillante oro a un lado del campo y en dirección transversal. La joven parecía dudar en ir a buscarla, pero yo la obligué a cogerla y una vez que cogió la manzana, ya la hice más pesada y estorbé a Atalanta tanto por el peso como por la detención y la joven quedó atrás; el vencedor llevó el premio.
¿Acaso no merecí que me diera las gracias, que me ofreciera incienso, Adonis?. Ni se acordó de darme las gracias y del incienso se olvidó. Esto provocó mi cólera, ofendida por el desprecio, me propuse dar un escarmiento.
Pasaban ellos junto al templo, oculto en el espeso bosque, que estaba dedicado a la diosa Cibeles, y yo les aconsejo descansar; entonces Hipómenes fue invadido por un inoportuno deseo, suscitado por mí, de yacer con Atalanta.
A un lado del templo había un rincón semejante a una cueva, con un revestimiento natural de una piedra pómez, lugar consagrado desde antiguo por la religión, donde el sacerdote del templo había llevado muchas imágenes de madera de antiguos dioses. Allí entran Hipómenes y Atalanta y profanan el santuario. La diosa Cibeles los castigó. Comenzaron a crecerle unas melenas azafranadas cubriendo el cuello, los dedos se les curvaron formando zarpas , ... en vez de palabras emiten rugidos y tascan con sus dientes los frenos del carro de Cibeles, convertidos en leones.
18 comentarios:
Eu teño unha pegada do animaliño en que se está a metamorfosear o señor Fabada.
Tendrán estos también su castigo? No sé, Dilaida, no sé.
bicos
La palabra clave es orate. ¿Casualidad?
Malos tiempos,malos y sin una luz de esperanza.
Además el Galicia Hoxe suprime su formato papel arrinconado por Feijoo.
¡Malos tiempos!
Bicos
Me encanta la narración de Atalanta, Hipómenes y la diosa Cibeles. No se relacionarla con tu Galicia, pero malos tiempos corren, no te quepa duda, y conviene estar preparados para cualquier acontecimiento. Beso.
Hay algunos que son ya ratas pues viven en la alcantarilla. Ojalá se pudiera convertir a algunos políticos en algo de provecho, por ejemplo en mulas.
Bicos
Salud y República
Al hilo de Ovidio y tu ingeniosa pluma, una se olvida de la realidad casposa que nos rodea.
Eso sí, no creo que se conviertan en leones, si acaso en lirones.
Bicos.
Siempre quedo admirada de la lectura que nos acercas.
Saludos Dilaida.
unha pena o do Diario...
era o diario galego que máis se ocupaba da cultura
Buena historia para los tiempos que corren, un saludo.
un convértese no que [de verdade] leva dentro, mais pronto o mais tarde.
ás fotos moi fermosas o mismo que a historia.
biquiños,
fermosas fotos e unha historia interesante
cada un acaba converténdose no que de verdade leva dentro.
biquiños,
Corren malos tiempos, y los que se avecinan. Aquí en la comunidad valenciana, el gobierno de Camps, va a copiar el proyecto de educación gallego del trilinguismo. Ha habido protestas, pero se aplicará. El valenciano tambien corre peligro desde que gobierna el PP, se le está ninguneando a marchas forzadas.
Dilaida, siempre es un placer visitarte. Nunca tus escritos me dejan indiferente, y si, corren malos tiempos...
Bicos
Mucho me temo que los castigados sean los gallegos. Es muy injusto que paguen todos por causa de un gobierno que sólo han elegido algunos. En fin, no hay que desfallecer. Un abrqazo.
Prefiro non falar nin poñerlle nome a eses animais que, segundo conta Manuel Rivas nun artigo de "El país", arremeten contra a base do futuro, a educación, alimentando opinións que desprestixian ao corpo do profesorado.
Así vai o país. E irá.
Unos han sido castigados, otros premiados, pero el castigo se convierte para la mayoría en una penitencia.
Agradezoche moito o comentario que me deixaches no blog, estou algo desconcertada de que me afectara tanto o do lume... unha cousa é velo na tele, que xa doe, e outra que calcine a paisaxe da túa infancia.
O día de despois fixo Falabarato un video que recolle as imaxes e consigue compoñer, ao meu xuicio, un vídeo moi fermoso da propia desolación. Podes velo no seu blog, ou no meu.
Que teñas un domingo bonito e disfrutes do dia.
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